Son muchas las dificultades que a menudo nos separan de nuestros objetivos, de nuestras metas, de nuestros propósitos, pero en la mayoría de los casos el principal obstáculo se encuentra en nuestra propia mente.
A nadie se le ocurre tomarse un chupito de cianuro cada mañana al despertar ¿verdad?, sin embargo no nos sorprende escuchar o decir frases del tipo me gustaría pero no es el momento adecuado…no soy lo suficientemente bueno…no servirá para nada…hay muchos mejores que yo…
Todas ellas son frases que forman parte de nuestras creencias limitadoras. Pensamientos tóxicos que contaminan nuestra mente y que acaban interfiriendo en nuestra actitud y en nuestras acciones. Es importante tomar consciencia de ellos e identificarlos cuando se producen, porque si no sabemos gestionarlos adecuadamente, pueden llegar a ser muy dañinos para nuestro bienestar y para nuestro entorno.
“Tanto si piensas que puedes, como si piensas que no puedes, estás en lo cierto” (Henry Ford)
Ésta es una muy frase muy conocida que evidencia una gran verdad: en muchas ocasiones el secreto del éxito no está tanto en lo que nos pasa, sino en la manera que tenemos de afrontar aquello que nos sucede.
Comparto contigo algunas herramientas muy útiles para combatir los pensamientos tóxicos:
1.- Habla con tu mente: la verbalización es una herramienta muy potente para encauzar los pensamientos. Cuando identifiques que estás teniendo un pensamiento negativo ponle un nombre que te sirva para separarlo de ti, tipo “esto es una creencia limitadora, esto es un chupito de cianuro…”
2.-Acepta tus emociones: No bloquees las cosas que sientes, durante el día tendrás emociones negativas y positivas, pero antes de ir a dormir dedica unos minutos para recordar sólo aquellas que han sido positivas.
3.- Cambia de aires: cambiar de actividad, dar un paseo, hacer estiramientos o algún tipo de ejercicio suele ser muy útil para desviar la mente de un pensamiento negativo.
4.-No busques culpables: hacerse la víctima y buscar responsables de tus males no te ayudará a solucionarlos y sí contaminará de negatividad tu mente. Toma las riendas de tu vida.
5.- No te compares con los demás: cada uno es como es y lo que vemos de los demás es sólo una parte de muchas más cosas que no vemos ni sabemos.
6.- Respira: dedica varios minutos al día a hacer respiraciones profundas, con ello ayudarás a oxigenar la sangre, lo que mejorará tu funcionamiento cerebral.
7.- Mímate: mírate por las mañanas en el espejo, piropéate y dite algo bonito. Sonreir genera endorfinas que nos aportaran bienestar.